Charlotte York es la mujer que quiero ser, pero soy Miranda Hobbes
De las 4 protagonistas de Sex and the City ¿Hay algo de malo en ser Miranda?
Al ser una mujer en sus casi 30s es de ley que he visto la serie de Sex and the City unas 4 veces ya. No me considero una experta en el análisis de los personajes, pero en muchísimas ocasiones me he sentido identificada con todas y cada una de ellas, incluso me he llegado a referir a Carrie, Samantha, Miranda y Charlotte como mis amigas íntimas. Creo que es una obligación, no solo para mujeres en todo el mundo, sino para cualquiera; hombres que quieran conocer mejor a las mujeres, personas de la comunidad lgbt+, amantes de la moda y la cultura pop en general, ver la serie. Y después de haberla visto, estoy segura que se verán reflejados en alguno de sus personajes.
Hace unos 2 meses, estaba scrolleando en TikTok; mi algoritmo muchas veces es casi perfecto y en ese momento no había más contenido en mi página de inicio que no fuera SATC (Sex And The City) y me topé con un video titulado Charlotte York Core, de fondo Espresso de Sabrina Carpenter, el edit perfecto para rendir culto a la personalidad de Charlotte y casi por instinto comenté: “Charlotte es la mujer que quiero ser, pero soy Miranda”.
1 like, 5 likes, 10 likes… el comentario estaba causando furor en el video. Hasta hoy, sé que me mis notificaciones en TikTok son porque alguien le ha dado like a ese comentario, probablemente mañana también entre a TikTok y las notificaciones sean de eso (el comentario lleva +2mil likes). Fue ahí donde me puse a reflexionar, todas queremos ser Charlotte York pero ¿Por qué nadie quiere ser Miranda Hobbes y qué hay de malo con ser Miranda?
Charlotte York Core
De las primeras veces que vi la serie, cuando tenía unos 17 o 18 años, tenía bien claro que JAMÁS podría ser Charlotte, incluso no deseaba serlo. No compartía sus sueños de casarse, tener una familia tradicional, amar el rosa y creer en el amor romántico. No me gustó cuando dejó su trabajo en la galería de arte por un hombre. Sentía que le faltaba un golpe de realidad (porque sí, Charlotte es la más privilegiada de las 4) porque todo lo veía color de rosa, me desesperaba su optimismo y su buena actitud, incluso odiaba su estilo tan Lady Like y preppy.
-Wow, justo al escribir ese párrafo confirmo que soy totalmente una Miranda Hobss-
Pero hoy en día, después de volver a ver la serie, a mis 28 años, he aprendido a amar otras cualidades de Charlotte que en su momento no veía.
Quisiera su poder y su feminidad, el cuidado en su imagen, su planeación estratégica del futuro y sobre todo el jamás rendirse para lograr sus sueños. El ser la romántica empedernida la llevó a jamás abandonarse ni perder su esencia, ni en las peores situaciones, la llevó a jamás darse por vencida en sus objetivos y a ser la más feliz de todas. Creo que es eso lo que quiero de Charlotte, esa felicidad en su rostro y su alma, tan genuina. La vez y dices “esta mujer se merece todo”. Además, es la mejor amiga de todas, literal, es la que mejor actitud tiene, la que apoya a todas, la que las aguanta y tolera no importa qué pase, es la amiga incondicional y leal que todos deberíamos ser y todos quisiéramos tener.
Y un poco de rosa en nuestro closet no nos vendría mal a nadie.
Embrace your Miranda.
Tengo bien claro que nunca seré una Charlotte y que sí tengo mucho (muchísimo de Miranda) pero no está mal ¿o sí?
¿Por qué no queremos ser Miranda? Miranda es totalmente lo opuesto a Charlotte. Es una mujer lógica, nada romántica, estratega, adicta al trabajo, egoísta, tomboy, sarcástica, irónica y un poco fatalista. Su lección de vida fue justo, hacerse cargo de una familia muy tradicional que hasta la llevó a abandonar su departamento en Manhattan y mudarse a Brooklyn. Puedo admitir que dentro de esa lista de características más de una está en mi perfil.
Pero Miranda es fuerte, es una mujer empoderada y exitosa, que sabe el valor de la amistad y el amor, aunque no vista de rosa, aunque no le gusten las flores, aunque prefiera quedarse en casa viendo la tele y comiendo comida china en lugar de ir de compras. Es una mujer que al igual que Charlotte tenía metas y las lograba, se daba su lugar y no daba su brazo a torcer tan fácil. Es sin duda un personaje que nos enseña sobre el esfuerzo y la dedicación, nos enseña que quizás la vida no es tan fácil y que no todo sale como lo planeamos al 100% pero que se puede encontrar la felicidad dentro de todo, porque al final, Miranda, es una romántica (yo también), cree en sus sueños, busca el amor (aunque jamás lo pida), se conmueve, llora, ríe, sabe sobre sacrificios en la vida y tiene un amor incondicional para sus amigas
(sus decisiones en el amor no las analizaremos en este post, porque sabemos que para Miranda ese fue su talón de Aquiles, ni tampoco analizaremos su personaje desde Just Like That –serie que estoy renuente a ver)
Ser Miranda no está mal, ¡Ya quisiera realmente ser tan exitosa como ella! Y Miranda dentro de esa coraza que muestra al mundo, no está tan lejos de ser como Charlotte y Charlotte, dentro de su fuerza demuestra ser como Miranda.
Jaja wow me encantó esta pieza. Hace poco vi la serie (solo había visto las películas), creo que por mucho tiempo me identifiqué con Miranda, pero del nuevo Sex and The City, mi favorita es definitivamente Charlotte. Siento que sabía lo que quería en la vida, casarse, tener a su familia y enfocarse en eso. A de que eso no sea lo mismo que yo deseo, realmente admiro que ella tenga sus objetivos bien puestos y disfrute su vida.
Te recomiendo mucho el libro "We Should All Be Mirandas: Life Lessons from Sex and the City's Most Underrated Character", está totalmente dedicado a analizar a Miranda desde todos los ángulos. Me encantó tu artículo y sólo difiero en que Charlotte es la mejor amiga, porque en realidad juzgaba a Samantha y en varias ocasiones a Carrie y Miranda, como cuando Samantha se acostó con su hermano y Charlotte hizo tremendo drama, o cuando Miranda se embarazó antes de decidir tener al bebé.
Desde mi POV la que es la mejor amiga de todas es Samantha, justo porque no juzga, es muy clara en sus convicciones pero no las juzga. Incluso en contra de todo lo que ella haría, una vez cuidó a Brady para que darle su lugar a Miranda con su estilista.